martes, 14 de junio de 2016

Compras: zafú

He incluído la practica de la meditación en casa por varios años y casi siempre he ocupado un cojín común y corriente para este fin, y aunque suele funcionar para este propósito la realidad es que la mayoría de los cojines suelen deformarse muy rápido y no brindan mucho soporte a la espalda o la cadera, lo cual a largo plazo hace que la espalda duela, los hombros pesen, y peor aún, es mucho más dificil conseguir concentrarse o llegar a un estado de relajación.


El zafu es un cojín de origen japonés, que generalmente es de forma circular (aunque también podemos encontrar modelos ovalados o de media luna), que son diseñados especialmente para mejorar la postura de la espalda y la pelvis al momento de meditar, de forma que nuestra espalda no se canse o lastime y se encuentre recta.


"Dice la leyenda que el zafu lo inventó Buda cuando se fabricó un cojín de hierbas secas sobre el que sentarse cómodamente a meditar. Realmente el origen del zafu está en China, de donde pasó Japón. Los zafus llegan a occidente de la mano de la meditación zen.

Aunque popularmente se piensa que la mejor postura para meditar consiste en sentarse directamente sobre el suelo con las piernas cruzadas (postura del loto), esto no es totalmente correcto, ya que si te sientas directamente sobre el suelo, tienes que tensar los músculos del pecho para mantener el equilibrio y no caer de espaldas. Sin embargo, al sentarte sobre un zafu el cuerpo se inclina ligeramente hacia adelante, las rodillas se apoyan en el suelo y se consigue una postura equilibrada y estable.

Cuando estás meditando encima de un zafu, todos los músculos se relajan, desciende el ritmo cardiaco, baja la tensión arterial, la respiración se vuelve más honda y se incrementa tu capacidad de concentración, favoreciendo así una meditación más profunda y tranquila."  Fuente


El zafú que he comprado es de La Cueva del Yoguí, está relleno de cascarilla de café y cuenta con una funda que puede retirarse y lavarse por separado de ser necesario, dejando el interior totalmemente intacto. La calidad del material y elaboración es excelente y el diseño que yo he elegido ha sido amor a primera vista, tiene un acabado impreso en serigrafía. Ya ni mencionar que es súper cómodo al usar.


La tienda cuenta con venta en línea, aunque yo lo he comprado fisicamente en su stand en una de sus tantas participaciones en exposiciones, asi que si gustan y están interesados en conseguir uno pueden visitar su tienda física o asistir a alguno de los festivales donde participan; esta información la pueden encontra facilmente en su sitio web o página de Facebook.




Lo único malo del zafu, es que es un poco pesado para transportar, así que realmente es un accesorio diseñado para tenerlo en casa y no para cargarlo a todas partes. Sin embargo si únicamente planean meditar en casa o dejarlo en un solo lugar es una excelente opción.



En San Youtube, existen muchos videos sobre los beneficios y formas para usar el zafú y algunos otros accesorios:




martes, 7 de junio de 2016

Inspiración: Meditación en poco espacio



En el hogar tenemos espacios que nos ayudan a llevar a cabo, diversas actividades que son importantes para nosotros. Tenemos un espacio para cocinar, estudiar, dormir, etc. Pero si queremos incluir la meditación en nuestras vidas también es importante tener un espacio en el que podamos relajarnos y simplemente ser.

A diferencia de lo que escribí cuando buscábamos un espacio para tener un altar en la casa, encontrar un espacio para meditar puede ser un poco más engañoso, ya que no solamente se trata de encontrar una superficie, sino de un lugar que este lo suficientemente aislado para que podamos tener paz, tranquilidad, concentración y privacidad.

Desde hace varios meses he tenido en mente el proyecto de crear un espacio sagrado, no únicamente como un altar fijo como lo tengo actualmente sino también un espacio en el que tenga la opción de meditar y pasar más tiempo en él. Ya que no tengo mucho espacio, he decidido buscar en Internet algo de inspiración y consejos para poder aplicarlos a este proyecto que a continuación les comparto.



DETERMINANDO OBJETIVOS
Lo primero a tener en cuenta es determinar cuál va a ser el objetivo de nuestro espacio, ¿se usará únicamente para meditar o tendrá alguna otra actividad como otro tipo de ritual o incluso actividades adicionales como yoga o incluso leer? ¿Será un espacio fijo que este día y noche o solamente un espacio temporal que se pueda quitar o poner? ¿Nos gustaría que este a nivel del piso o nos gustaría ocupar un sillón o algún otro de superficie especial?


A diferencia de lo que hicimos para elegir el espacio de un altar, al pensar en un espacio para meditar debemos tener en cuenta que sea un espacio lo suficientemente cómodo para poder estar sentados, parados, de rodillas o incluso acostados y que podamos incluir todas las actividades que tenemos planeadas. En base a esto podemos determinar el espacio que buscamos. No es necesario que sea una habitación entera, bastará buscar una esquina, una parte de un cuarto, debajo de las escaleras, un pedazo en el patio o al lado de una ventana. Lo importante es que podamos tener acceso a cierta privacidad y tranquilidad.


ELEMENTOS NECESARIOS
En este punto es donde considero importante mover, cambiar, poner o eliminar aquello que necesitamos para lograr nuestro objetivo, esto puede ser desde cambiar una mesa o la iluminación, hasta sacar aquella televisión que nos estorba. Poner una alfombra o un cojín necesario, que formarán la base de lo que estamos buscando y que sobre todo lo haga un lugar cómodo y agradable.







DECORANDO EL ESPACIO
Finalmente, es recomendable añadir elementos nos ayuden a generar el ambiente deseado, con esto me refiero a sonidos como campanas de viento o cuencos tibetanos, hasta estatuas, plantas, cristales, inciensos, velas, etc. que nos sean a fin con nuestra práctica.

Es importante mantenerlo sencillo y únicamente con lo necesario si tenemos un espacio limitado.














Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...